Adopción del Judaísmo
GUIUR

Abrimos las puertas del judaísmo a todos aquellos que quieran incorporarse a nuestro pueblo, adoptar sus tradiciones y enseñanzas como una alternativa de fe y compromiso ante el mundo moderno.

Ser Judío, sin duda no es una condición racial pero tampoco es una condición individual; no obedece a ninguna definición absoluta, pero emplea normas colectivas que regulan nuestro funcionamiento como colectividad, dándonos unidad en la diversidad.

Las normas de la “Halajá” (que surgen del Talmud y la interpretación rabínica), hasta ahora vigentes, establecen que el ser judío se adquiere al nacer si la mamá es judía (se llama la Ley del vientre) o cuando un tribunal rabínico admite dentro de la grey a una persona no nacida judía.

El procedimiento que se sigue en el Tribunal Rabínico es muy similar al que emplean la mayoría de las naciones modernas para otorgar residencia o ciudadanía a un nativo de otro país. El nombre tradicional del procedimiento es “Guiur”, palabra que deriva de la palabra “lagur” que significa residir.
Cuando una persona nacida no judía desea integrar el pueblo judío debe prepararse para ello tanto intelectualmente como emocionalmente. Acreditar un conocimiento aceptable de la Tradición y la Historia judía, mostrar que su voluntad de pertenecer a la colectividad nace de una decisión libre y honesta.

En PARDES ofrecemos un marco de preparación. Acompañamos a los que se interesan en ser judíos, caminando a su lado y a su ritmo, en un recorrido que los llevará hasta nuestros patriarcas, para retornar al presente llenos del espíritu y la fuerza del judaísmo.
Cuando la persona interesada completa su preparación es examinada por el Tribunal Rabínico y una vez que ha sido aprobada se realiza una breve ceremonia que comienza con la “Tevila” (hace click para leer más sobre “Mikva”). Si el interesado es un varón, previo a la “Tevila” debe haber practicado el “Brit Mila” (hacer Click)

Aunque la “Halajá” (las normas que surgen del Talmud y la interpretación rabínica) no lo consideran, somos muchos los Rabinos modernos que abogamos por que sea reconocida también la “patrilinealidad”. Es decir el derecho de los hijos e hijas de un padre judío para ser reconocidos como judíos aunque su madre no sea judía. De hecho el Estado de Israel en su legislación civil reconoce ese derecho, y aunque preferiríamos no mencionarlo no podemos olvidar que hace poco más de 60 años los nazis mandaban al exterminio a cualquiera que se sospechara que tenía uno de sus abuelos judío. También el Movimiento Reformista lo ha reconocido hace varios años atrás. En el Movimiento Masorti/Conservador aún se está discutiendo.

La Fundación PARDES está inscripta en el Movimiento Masorti/Conservador. En el tema de la “patrilinealidad” somos críticos y promovemos el cambio pero entretanto tratamos de ajustar nuestra práctica a los estándares y regulaciones del Movimiento Masorti/Conservador.
A los hijos de padre judío que expresamente desean ser reconocidos como judíos les facilitamos los procedimientos para que puedan dar por cumplido las formalidades requeridas por la “Halajá” pero a cada uno según su propia situación de vida, entendiendo que quien tiene asumida su identidad judía merece absoluto respeto independiente de lo que establece las norma.

LOS CURSOS DE PREPARACIÓN PARA LA ADOPCIÓN DEL JUDAÍSMO (conversión) SON PERSONALES.
Para más información consultar y pedir entrevista en secretaria: 1130597737